La ADR busca transformar la extensión agropecuaria

Con la creación de la Ley 1876 de 2017, que dio vida al Servicio Público de Extensión Agropecuaria, se han presentado diferentes obstáculos y demoras para su implementación, además de las prácticas perversas por parte de quienes fueron contratados en años anteriores para llevar este servicio a los campesinos.

Tales dificultades han llevado a que los productores de la agricultura campesina, familiar y comunitaria sean los más afectados.

Debido a esto, la Agencia de Desarrollo Rural (ADR) acogió el informe de la Dirección de Estudios Sectoriales de la Contraloría delegada para el sector agropecuario, para corregir las distorsiones y hacer que este servicio llegue a quienes lo necesitan, lo cual que se sumará a las decisiones tomadas por la entidad para mejorar el servicio.

Una de las acciones implementadas desde la ADR es la cofinanciación del servicio de extensión agropecuaria en los 32 departamentos del país, a través de ocho convenios interadministrativos y un contrato con universidades públicas, que han permitido tener una cobertura nacional de 122.228 usuarios.

Entre mayo de 2023 y abril de 2024 se comprometieron recursos por 105 mil millones de pesos, y fueron atendidos con el servicio 35.022 productores.

Asimismo, para mitigar posibles riesgos en el aplazamiento de la prestación del servicio a las familias rurales, desde la Dirección de asistencia técnica de la ADR se ha diseñado una estrategia para la extensión agropecuaria, así:  

  • La primera es el acompañamiento a los 32 departamentos para la construcción de los Planes Departamentales de Extensión Agropecuaria (PDEA) para el periodo 2024-2028, incorporando enfoques como el territorial, de género, de transición hacia la agroecología, de construcción de paz, de soberanía alimentaria y derecho humano a la alimentación, entre otros.
  • La segunda medida es la implementación de la escuela nacional de promotores y extensionistas para la Reforma Rural Integral. Esta escuela está orientada a fortalecer capacidades sociales y asociativas, para brindar el servicio de extensión agropecuaria con principios de diálogo de saberes e innovación colaborativa. 
  • Igualmente, la ADR trabaja en un modelo de territorialización de la extensión agropecuaria, que tiene en cuenta las particularidades regionales, con extensionistas y promotores rurales de cada localidad.
  • Así mismo, se adelanta la gestión de vigencias futuras para la prestación del servicio de extensión agropecuaria por un periodo mayor a 6 meses, en concordancia con el Plan Nacional de Asistencia integral.

En relación con el Fondo Nacional de Extensión Agropecuaria (FNEA), se viene avanzando en la elaboración del manual operativo que definirá los lineamientos para identificar fuentes de financiación y su operación, para seguir prestando el servicio de extensión agropecuaria en el país. 

*Fuente: Agencia de Desarrollo Rural

Deja un comentario